octubre 07, 2014

Niña

Teníamos 10 y 11 años y nos besamos bajo las mantas del campamento.
Era torpe mover mi cuerpo contra tus rodillas huesudas.
Tus piernas tenían las costras marrones de los caprichos de una niñez que nos era arrancada.
Quisimos prestar resistencia, chillamos, corrimos, nos revocamos en el pasto tragando tierra y algunos bichos... Pero nos dejamos vencer por el beso húmedo y torpe, por el calor y la angustia de desear la cercanía de lo desconocido, frotando mi anhelo contra tus ganas de llorar.

Verano 1999

No hay comentarios: